Mejores prácticas para rentabilizar un Sistema de Gestión de la Calidad
Sistema de Gestión de la Calidad
Un Sistema de Gestión de la Calidad tiene la capacidad de ayudar a medir a través de diferentes herramientas. En este sentido, medir es a base para llegar a conocer el estado en que se encuentra la empresa u organización, y así poder comenzar con el diseño de la calidad.
En cuanto a qué medir esto tendrá que estar relacionado con aquello que haga sostenible el negocio en cuestión. A partir de esta medición es el momento en que se empieza a diseñar la calidad.
A la hora de hacer un diseño de la calidad es necesario contar con un enfoque estratégico y de procesos. En este sentido, la norma ISO 9001 es la herramienta que brinda las herramientas y genera buenas prácticas de cara a una gestión eficaz en el diseño de un Sistema de Gestión de la Calidad de una empresa u organización.
En la ISO 9001, más del 80% de los requisitos están enfocados en la planificación. A través de la planificación se alcanzará la rentabilización del Sistema de Gestión de la Calidad, pues lo que se vaya a ejecutar va a obtener unos resultados de acuerdo al esfuerzo que se hizo en la planificación.
Si se planifica poco o mal el resultado no podrá ser positivo. En el caso contrario, si se le dedican recursos a la planificación se obtendrán resultados beneficiosos.
Planificación
En este sentido, si se quieren alcanzar los objetivos propuestos para el Sistema de Gestión de la Calidad será necesario dedicarle un tiempo importante a la planificación. Y es que en la ejecución se obtendrán los resultados esperados.
Por ello, ISO 9001 no es solo un conjunto de políticas y controles aislados. En la norma se establecen una serie de buenas prácticas estandarizadas e integradas que permiten a una organización asegurar la satisfacción de sus clientes y la sostenibilidad del negocio.
En un mundo cambiante y globalizado, se requieren más especificaciones. Hace unos años ISO 9001 y un Sistema de Gestión de la Calidad estaba más enfocado en grandes compañías, un hecho que ha cambiado recientemente.
Hoy en día, pequeñas y grandes empresas se manejan y se miden de igual modo. Para poder lograr que un sistema sea integrado, consiguiendo que se lleve a cabo una toma de decisiones a tiempo, hay una serie de documentos clave que son la base del Sistema de Gestión de la Calidad.
Documentación
Si no se llega a entender el contexto de la organización, cuáles son los stakeholders de la misma, las partes interesadas, la planificación en la misma será muy complicada. Uno de los requisitos de la norma ISO 9001 habla de entender el contexto de la organización, identificando las partes interesadas, y es necesario que se haga de un modo dinámico.
También hay documentos en los que se expresará la política y los valores de calidad con los que cuenta la organización, así como metodologías para tratar y evaluar los riesgos del negocio. Esto último hará referencia a aquellos riesgos que pueden hacer que el negocio no se sostenga en el tiempo.
A ello habrá que sumarle la gestión del conocimiento y mapas de procesos donde es posible internalizar y que cada uno de los dueños del proceso sepa qué tiene en este y cuáles son los resultados que tiene que obtener, entre otros aspectos.
En resumen, puede decirse que con todo este conjunto de documentos una organización puede descubrir que la calidad se diseña en cada una de las áreas operativas, administrativas o legales de la compañía.
Curso Auditor Interno ISO 9001:2015
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Los alumnos podrán adquirir o actualizar sus destrezas, sus habilidades y sus conocimientos para poder evaluar la implementación y conformidad de los procesos del Sistema de Gestión de la Calidad, incluyendo su planificación, organización y auditoría. Tras superar el curso, el alumno quedará totalmente habilitado para ejercer como Auditor Interno ISO 9001 2015, obteniendo sus certificados correspondientes.
