En la última versión de la norma ISO 9001 encontramos una idea que cobra especial importancia, que está fundamentada en el riesgo y a cómo este puede ser redirigido hacia la oportunidad. Podremos así evitar resultados anormales en los procesos de nuestra organización, incluyendo el epígrafe dentro de la gestión del cambio.
Los Sistemas de Gestión de Calidad son soportados por una estructura sólida y precisa en busca de la excelencia, y la satisfacción de la organización donde sean implantados. Esto genera un volumen elevado de información para evaluar, analizar y tomar decisiones con base en ellos. Se necesita el apoyo de una buena gestión documental que facilite y automatice estos procesos, y nos evite posibles errores.
La norma ISO 9001, una de las más populares y extendidas y que se encarga de velar por la calidad de los procesos en nuestra organización, recomienda la implementación de un Sistema de Gestión de calidad que tenga un líder y a un equipo comprometido. A este líder le llamaremos el responsable de Calidad.
El desarrollo de la actividad empresarial viene acompañado de la gestión de riesgos y oportunidades. ¿Hay posibilidad de emprender y consolidar nuestra actividad riesgos. Lamentablemente la respuesta es no.
Antes de entrar en materia, debemos resaltar de forma general la importancia de una buena planificación, y posterior seguimiento de la misma, para cualquier área dentro de nuestra organización. De forma específica abordaremos aspectos clave para alcanzar objetivos dentro de la norma ISO 9001.
La norma 9001, la norma de referencia internacional para la implementación de un sistema de gestión de la calidad (SGC), registró una modificación en septiembre del 2015 otorgándole en la actualidad una nueva estructura que modifica, elimina y añade nuevos requisitos. En este artículo nos centraremos en tratar esas modificaciones desde la Gestión Documental.
